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jueves, 19 de noviembre de 2015

Un paseo por EORZEA Cafe (Final Fantasy Restaurant) ~ Akihabara

Nuestra seguidora Ilwën Depp ha escrito un artículo en su blog sobre su visita al café temático de Final Fantasy que Square-Enix ha abierto en Tokyo y ha sido tan amable de querer compartirlo con nosotros.

Para no robarle visitas, os copiamos aquí un fragmento de ese artículo y os dejamos el link al artículo original para que veáis el resto.

¡Buenas noches pequeños y pequeñas viajero/as!

Esta vez volvemos a tener una entrada sobre un sitio que podemos encontrar en Japón relacionado con los videojuegos. La verdad es que ya era bastante raro que Square no hubiera hecho algo parecido antes, pues sí bien hace años que tiene una cafetería en Shinjuku, el año pasado en Septiembre o así decidieron montar un restaurante, y el sitio no podía ser otro que Akihabara. 
Aprovechando que era el último día de un amigo en Japón, fuimos a comer allí. El sitio esta muy cerca de la estación, a unos 6 o 7 minutos, pero os aconsejo llevar GPS o mirar muy bien el mapa antes o puede ser lioso llegar. También tenéis que saber que esta situado en la segunda planta de un PASELA RESORT, por lo que tenéis que buscar el local de PASELA y no algo donde ponga "Final Fantasy"

Una vez en la segunda planta del PASELA os preguntaran a donde queréis ir, pues hay 3 restaurantes temáticos en esa planta, y si queréis pagar juntos o por separado. Para hacer el pedido te dan un papel con todas las bebidas y comidas y tu marcas con un circulo lo que quieras, y al final entregas ese papel y te dan la cuenta. Por eso si queréis pagar por separado hay que decirlo antes para que os den papeles a cada uno.  
El restaurante esta inspirado en el Final Fantasy XIV, y nada más entrar hay una sección con ordenadores para que puedas jugar a dicho juego. Pero primero hay que comer o al menos pedir, así que os asignan una mesa y os dan el menú, que luego pondré. 
  Para leer más: artículo original


martes, 17 de noviembre de 2015

Dragon Quest VII y Dragon Quest VIII llegarán a occidente en 2016.


La mayoría de los fans de esta saga habíamos perdido la esperanza de que nos llegaran los remakes de Dragon Quest VII y Dragon Quest VIII a 3DS, pero por fin Nintendo a confirmado que su llegada es oficial. 

Ambos juegos llegarán a la consola portátil de Nintendo durante el año 2016, aunque claro está no conocemos ni la fecha aproximada ni si habrá algún cambio respecto a las ediciones niponas. Habrá que esperar un poco más para conocer algunos datos nuevos de estas nuevas adaptaciones. 




Edición Deluxe de Bravely Second



Se ha anunciado que Bravely Second tendrá una edición Deluxe. Esta edición traerá una caja exclusiva, la banda sonora, un libro de arte y una figurita de Agnes. Aún no se sabe cuanto valdrá esta edición ni cuando saldrá, únicamente se conoce que será a principios del 2016. 




Edición coleccionista de Final Fantasy Explorers.



Se ha confirmado que la edición coleccionista de Final Fantasy Explorers para 3DS llegará a Europa. Esta edición traerá consigo, un libro de arte, la banda sonora de juego, una funda exclusiva para nuestra consola, una caja especial para la edición y misiones y armas exclusivas para el juego. Su precio será de 69'99€ y únicamente se venderá en la tienda de Square Enix.

Recordamos que el juego saldrá el 29 de Enero del 2016 y traerá consigo de forma totalmente gratuita todos los contenidos descargables que habrá hasta la fecha en Japón.




jueves, 29 de octubre de 2015

Novedades: 1 mes, 1 juego.

¡Hola finalfantasiosos!

Sé que hace mucho que no me dirijo a vosotros y me sabe mal no haberlo hecho, de dejado mucho tiempo este blog abandonado y menos mal que mi compañero se ha encargado de hacer las actualizaciones de las noticias, porque si no fuera así, estaría el pobre con telarañas y todo.

Hoy me dirijo a vosotros para comunicaros unas cuantas ideas que me han venido a la cabeza. La primera de ellas, es continuar con la sección de ¿Por qué es el mejor personaje? y también quiero hacer un par de secciones nuevas que aún estoy pensando.

La segunda noticia o idea, es que voy a hacer una rejugada de los títulos enumerados, o al menos de la mayor parte de ellos. Empezaré cada mes con uno hasta finalizar el año 2016, y durante el mes siguiente os traeré un pequeño análisis. Ya comencé hace tiempo con un análisis de los juegos pero la verdad es que no me gustó en absoluto como quedó así que lo voy a retomar. Una vez haga esto o incluso a la misma vez haga lo mismo con los juegos de Kingdom Hearts y con los de Dragon Quest, aunque no estoy segura de poder.

En la medida que pueda quiero publicar una o dos entradas al mes, (si pudiera ser me encantaría que fuera una entrada a la semana, pero lo dudo.) Con estas entradas me refiero a todas ellas que no tengan nada que ver con las noticias, ya sea, con la sección de personajes o con primeras impresiones, reflexiones sobre la compañía etc.

Por último deciros que he hecho una firma para cuando yo publique este tipo de entradas, esta firma indicará que la autora de la entrada soy yo, Meilin Leonhart, y que no se trata de ninguna entrada informativa, noticias, etc.

Espero que os gusten las novedades, os dejo a continuación la firma. ¡Saludos!




viernes, 31 de julio de 2015

Square Enix anuncia Final Fantasy Explorers para 3DS

COMIENZA LA BÚSQUEDA DEL GRAN CRISTAL




Square Enix Ltd., ha anunciado hoy que FINAL FANTASY EXPLORERS®, una nueva aventura de rol y acción, llegará a Europa y los territorios PAL en exclusiva para la consola Nintendo 3DS™. En solitario o en compañía de hasta tres exploradores más, los jugadores deberán adentrarse en las mazmorras para reunir los cristales que se encuentran dispersos por todo el mundo mientras se enfrentan a enemigos clásicos de FINAL FANTASY.

FINAL FANTASY EXPLORERS permite a los exploradores jugar de forma cooperativa con sus amigos y dominar más de 20 oficios nuevos y ya conocidos, entre ellos el de caballero, monje, mago negro y mago blanco, para derrotar a los monstruos más poderosos del reino e incluso hacer que luchen a su lado. Los jugadores podrán recurrir al poder de eidolones como Ifrit y Bahamut y también transformarse en otros legendarios personajes de la serie FINAL FANTASY a través de la función de trance. Las funciones multijugador harán uso del modo de comunicación inalámbrica de Nintendo 3DS.

FINAL FANTASY EXPLORERS estará disponible a partir del 29 de enero de 2016 para Nintendo 3DS.





Enlaces relacionados

Página oficial en Facebook®: www.facebook.com/FinalFantasy
Twitter® oficial: www.twitter.com/FinalFantasy


martes, 7 de julio de 2015

Final Fantasy XIII: Reminiscence -tracer of memories- CAPÍTULO X – PASAJERA

Estoy en un tren. Me metieron en este tren, como mero cargamento. Mis manos están esposadas, llevo una camisa de fuerza, y me están llevando a algún lugar, junto a toda esta gente…


Todos están en sus asientos, cabezas y ánimos bajos. Las capuchas de los atuendos de contención ocultan sus expresiones de forma que no puedo verlas, pero sé que todos los rostros a mi alrededor deben de estar teñidos de miedo y desesperación. Nuestros apacibles días nos han sido arrebatados sin previo aviso, y estamos a punto de ser exiliados, llevado a un mundo lleno de peligros. Soldados con rifles nos vigilan, alerta.

De pronto el tren se zarandea violentamente. Los soldados pierden el equilibrio, y en ese momento salto de mi asiento.

Corro hacia los soldados, los mando volando. A un soldado se le cae un control remoto de la mano y lo rompo en pedazos bajo mi talón; los cierres eléctricos de nuestras esposas se abren. Los otros soldados están a punto de venir a por mí. Me quito el traje de contención y doy un salto. Aterrizo justo en medio de mis enemigos, y una buena patada los quita de en medio.

… Oh. Estoy soñando.

Me doy cuenta de esto mientras disparo el rifle que acabo de quitarle a un soldado enemigo. Y tan pronto como me doy cuenta de que esto es un sueño, recobro el sentido.

Era un sueño de ese otro mundo. Ha pasado algo de tiempo desde la última vez que ocurrió. Creo que es porque estuve repasando mis apuntes de las entrevistas anoche. Sazh me describió con gran emoción (e incluso imitó) cómo Lightning se coló en el tren de la Purga y se encargó de todos los soldados.

Al final todavía no he publicado los resultados de esas entrevistas.

El vínculo entre Lightning, Sazh, Hope y los demás, el lazo que los une… es una historia de cómo los humanos se unieron para enfrentarse al Altísimo, y sé que si la comparto con todo el mundo sería una fuente de coraje y esperanza para la gente. Pero también sé que una vez lo hiciera, todos los ojos se volverían hacia Lightning y sus amigos, lo quisieran o no. Me preocupa alterar sus tranquilas vidas, no cuando ya han dejado atrás tanta lucha. Así que en otras palabras, me costó mucho conseguir las entrevistas y descubrir la verdad, pero al final no me siento capaz de publicar mis descubrimientos. Soy un fracaso como reportera, lo sé.

No lo negaré. Últimamente me he alejado demasiado de lo que un reportero se supone que debe ser.

Mi antiguo yo, la persona que fui, creo que tal vez murió en ese campo de batalla.

Estaba cubriendo la guerra civil cuando por poco termino criando malvas, y después de permitirme el mínimo tratamiento médico y descanso, volví una vez más al campo de batalla. Los que había a mi alrededor trataron de detenerme, pero no les escuché. Me acerqué a las fuerzas opuestas, e hice lo que pude para conseguir todas las versiones de la historia sin prejuicios ni predilecciones. Me aseguré de mantener una posición neutral, para evitar cualquier declinación en mis informes, y para evitar presentar a nadie como “los malos”. Tuve mucho cuidado de cubrir todo ángulo posible.

Mis esfuerzos para mantenerme totalmente neutral dieron resultado, creo, porque de alguna manera me gané la confianza de las muchas fuerzas en liza. Empezaron a hablar francamente conmigo, y descubrí que muchos de ellos no querían luchar para nada. El único problema era que nunca encontraron una manera de sentarse a hablar con sus enemigos.

Ahí es donde entré yo. Adopté el rol de mediadora. Permanecí en el medio, junto a todas las fuerzas que participaron, y mientras llevaba a cabo mis deberes como reportera, también llevaba mensajes, organizaba negociaciones, me las arreglaba para que se mantuvieran en contacto. Sólo era el canal, pero también me estaba implicando hasta el cuello en las cosas de los principales contendientes en la guerra. Estoy bastante segura de que ya me he pasado por alto el código ético que todos los reporteros tratan de proteger, la necesidad de mantener la objetividad en todo momento. Peor aún, si las cosas no salen como se supone, podría verme muy bien envuelta en una acusación como cómplice de crímenes de guerra.

Soy consciente de todo eso, y no me preocupaba lo más mínimo. Quería ayudar a ponerle punto y final a la guerra civil. Así que aquí estoy, en medio de los preparativos de un encuentro muy importante. El plan es que todas las facciones envueltas se encuentren en otro país, lejos del campo de batalla, y que se sienten a hablar. No sé si va a funcionar. No puedo descartar la posibilidad de que haya asesinos que vayan a por mí, cortesía de quienes quieren sabotear las negociaciones.

Pero no importa si acabo muerta, porque lo único que implica es que volveré a encontrarme con Caius Ballad. Si muerdo el polvo mientras camino en la dirección que considero correcta, creo que podré plantarme frente al Dios de la Muerte con orgullo en mis ojos en esta ocasión.

No soy tan vanidosa como para creer que puedo cambiar el mundo yo sola. Pero creo que puedo ayudar a guiar el mundo en una dirección mejor. Ése es el coraje, la esperanza que encontré en la historia de ese otro mundo.

Cada vez que pienso en esa historia, mi corazón se ilumina un poco.

. . .

Estoy acabando de salir de mi ensoñación, y desearía poder haber dormido un poco más. De verdad quiero descansar en este viaje en tren: me quedé despierta trabajando anoche y hay un encuentro importante esperándome allá donde voy. Había sido una siesta agradable, pude relajarme en los cómodos asientos del tren y sentir el rítmico dueto de ruedas y raíl en mi interior. Era agradable, y deseaba que no terminara.

Cierro los ojos, y por un rato me dejo llevar por el zarandeo del tren. En algún momento, una intensa luz atraviesa mis párpados. Estoy envuelta en la luz del sol que se filtra por la ventana; abro a regañadientes los ojos y miro fuera. El cielo es azul y los verdes campos se extienden ante mí bajo la brillante y limpia luz solar. Llegaré a mi destino en algún momento de la tarde, así que aún falta mucho. No me hará daño dormir un poco más.

El tren empieza a perder velocidad poco a poco. Debemos estar acercándonos a la siguiente estación. Oigo pasos que se acercan por detrás y pasan de largo. Debe de ser un pasajero que se baja aquí. A través de los divisores de mi asiento, atisbo un relámpago de la espalda de una chaqueta ligera. Una mujer con el cabello del color de las rosas.

Estoy completamente despierta el momento siguiente.

Me golpea como un rayo. Me levanto del asiento como si me hubiera quemado, y susurro, atónita:

-Lightning…

Ella se detiene.

Se gira hacia mí, con una mirada afilada en su rostro. No la culpo; yo también me pondría en guardia si un desconocido me llamara por mi nombre sin previo aviso. Pero bajo esa expresión tan dura creo ver también un rastro de Serah Farron.

Es Lightning, no hay duda. Su nombre fue mencionado en cada una de las entrevistas que realicé. Es irónico. Quería tanto conocerla, pero no había manera de dar con ella. Y aquí estoy, cara a cara con ella, por pura casualidad.

Ella no dice nada. Empiezo a hablar.

-Siempre he querido conocerte. Conocí a todos, pero eras la única a la que no podía llegar.

Ella parece saber de lo que hablo.

-… Ya veo, así que eres tú.

La dureza de su mirada se desvanece.

-La reportera que ha estado persiguiendo a todos, y quería conocerme. Sí, he oído hablar de ti.

-Por favor, me encantaría poder entrevistarte.

Un ensordecedor chirrido de los raíles ahoga mi voz. El tren está perdiendo velocidad rápidamente. Estamos llegando a la siguiente parada.

Ella echa un vistazo a la ventana, y sacude la cabeza.

-Lo siento, pero no tengo tiempo para charlar. Ésta es mi parada.

-Entonces iré contigo, yo…

Me bajaré aquí también, estoy a punto de decir, cuando me doy cuenta.

Tengo una suerte tremenda, dando con Lightning aquí después de tanto callejón sin salida siguiéndole la pista. Probablemente no vuelva a pasar, así que no puedo dejar que este encuentro se me escape de las manos.

Pero ahora mismo, yo…

Tengo que apartar la mirada, decepcionada. Con un suspiro, me obligo a decir:

-… Lo entiendo. Qué mala suerte, pero supongo que no siempre puedo salirme con la mía.

-¿Estás segura?

Parece más sorprendida de lo que yo lo estoy. No creo que esperara que me rindiera tan pronto.

Vale, sí, estoy decepcionada, claro que sí.

Pero ésta no es mi parada.

Tengo una misión. Hay alguien con quien debo encontrarme en mi destino, y aún falta para eso. Tengo que encontrarme con esta persona para hallar una forma de detener la guerra. Es mi deber. No hay garantía de que mis acciones, insignificantes como son, acaben con la guerra, pero he decidido que lo voy a intentar.

Encontraré el camino que lleve al final de la guerra, y lo seguiré tan rápido como pueda. Ésa es la misión que me he asignado a mí misma. La gente que desea la paz me espera al final de este camino. No puedo bajarme antes de mi parada.

Alzo la cabeza y miro a Lightning.

-Hay cosas que debo hacer. La entrevista queda en pendientes, si estás de acuerdo.

-No estoy tan segura de eso.

Sus palabras son un poco desalentadoras, pero su voz es amable. Al menos no me ha dicho que no rotundamente.

-Hay algo que quiero que sepas. Siempre he querido decirte esto, si algún día te conocía.

Estamos casi en la estación, y el tren está a punto de pararse. No hay tiempo. El sonido de los chirriantes frenos me dice que tengo que darme prisa, y mis palabras surgen apresuradamente:

-Yo… No, todos nosotros, la humanidad, estamos bien. Sin duda vamos a estar bien. Hay veces en las que cometemos un error tras otro, cuando nos hacemos daño los unos a los otros. Pero aun así, este mundo… este mundo que tú y tus amigos ganasteis en vuestra victoria contra el Altísimo… está construido por nosotros, somos lo que sustentamos este mundo, somos sus cimientos. Así que trataremos de sacar este mundo adelante, con la poca fuerza que tengamos, por nosotros mismos. Quizá seamos pequeños e insignificantes solos, pero juntos haremos de este mundo un lugar mejor.

-… Entiendo. Lo dejo en vuestras manos.

Asiente, y se da la vuelta. Es un adiós.

Miro por la ventana cómo Lightning salta a la plataforma y se aleja. El tren empieza a moverse, e inmediatamente la pierdo de vista. Extrañamente, me descubro no lamentándome nada. Su expresión cuando nos separamos está grabada en mi memoria, y aún puedo verla.

Era una cálida, dulce sonrisa. Y la verdad, me cogió por sorpresa. Siempre imaginé que Lightning era estricta y exigente, y que nunca bajaba la guardia. Nunca pensé que la vería sonreír así.

Y se me ocurre que su lucha acabó en ese otro mundo.

Lightning envió al Dios de la Luz a su tumba, y al hacerlo se liberó a sí misma de tantas batallas. Y no es la única que obtuvo la libertad. El Altísimo, el manipulador de la humanidad, fue derrotado, y todas las almas humanas escaparon de su yugo para renacer en el nuevo mundo.

Eso la incluye a ella. Ella también ha renacido.

Ya no tiene que luchar más. Igual ni siquiera se hace llamar “Lightning” ahora. Una vida tranquila, su corazón abierto a sus amigos y familia, gente que significa un mundo para ella, compartiendo alegres sonrisas… Seguro que ésa es su vida ahora.

Tengo la impresión de que volveré a verla, en algún lugar, algún día. Nunca he podido dar con ella, y ni siquiera ahora, después de encontrármela accidentalmente, dispongo de su dirección; aun así, estoy completamente segura de que ésta no será la última vez que nos veamos. Sabe quién soy. Seguro que ha oído hablar de mí a alguno de sus amigos. El vínculo entre ellos es tan fuerte como siempre, incluso después de su renacer en este mundo. Si visito a sus amigos otra vez, seguro que la encontraré en algún lugar. Aún son amigos, después de todo, y siempre serán parte unos de otros.

Se me ocurre preguntarme por qué se bajó en aquella estación. ¿Acaso va a encontrarse con alguien? ¿Quizá alguno de sus amigos está esperándola? ¿O va a reunirse con alguien especial para ella a quien no conozco? No importa qué respuesta es la correcta. Ahora ella es libre. Puede ir donde quiera y encontrarse con quien quiera. Lo que ella desea sin duda se hará realidad. Quiero eso para ella, desde lo más profundo de mi corazón.



“La voluntad de la humanidad determina el destino de este mundo sin el Altísimo.” Si esto es así, quiero creer que si lo deseo de verdad, un futuro aún más radiante la está esperando. Que esta mujer, que una vez fue una brillante luz en ese otro mundo, encuentre la esperanza. Éste fue mi deseo, y fue como una plegaria, una promesa.


Final Fantasy XIII: Reminiscence -tracer of memories- CAPÍTULO IX – SIN ALIENTO

Cuando el viento cesa, un desagradable olor asalta mis fosas nasales. Es el olor de algo ardiendo…


El olor de la cocina o de una hoguera debería ser bueno, agradable, pero este olor en el aire sólo me pone enferma. Es el olor que consigues cuando cosas que deberías quemar y otras que no arden juntas, y es un ataque a la base misma de mi nariz. Y también está el olor del polvo y el sudor incluido en el lote.

Intento ver qué es lo que arde, pero no veo ningún fuego a mi alrededor. Creo que el olor lo ha traído aquí el viento desde lejos, pero justo mientras lo estoy pensado me doy cuenta. Qué idiota soy. El olor viene de mí. El olor del humo se ha pegado a mi pelo y a mi ropa. Se me debe haber quedado cuando pasé la barricada de la esquina de la calle hace un momento. La milicia atrincherada en la barricada había estado quemando tiras de neumáticos y basura variada en cubas de acero. Una cambiante pantalla de humo.

Hace unos pocos meses, éste era un apacible y remoto pueblo. Ahora es un campo de batalla con todas las de la ley. Disparos, explosiones, aullidos de ira y gritos resuenan a través de estas viejas calles de ladrillo. Y no son exclusivos de este pueblo. Todas las provincias vecinas también se han convertido en un campo de batalla para la violencia.

Este país está actualmente dividido por una guerra civil. Empezó con una relativamente pacífica manifestación, pero hubo un violento levantamiento, se derramó sangre, y eso encolerizó al pueblo, convirtiéndolo en una masa agitadora. El gobierno trató de subyugar al pueblo por la fuerza, pero parte del ejército se puso de parte de los ciudadanos, y en contra del gobierno. Eventualmente se alzaron las banderas de la revolución, hubo un golpe de estado, y las riendas del poder cambiaron de mano; y ahora mismo, la nueva autoridad la está pagando con sus predecesores. Rencillas étnicas de hace largo tiempo, viejas hachas de guerra que deberían haberse enterrado fueron desenterradas, las chispas del conflicto volaban por todos lados, la gente moría en accidentales asaltos cuando se desató la guerra absoluta, las fuerzas armadas de otros países fueron desplegadas como quien no quiere la cosa y añadieron leña al fuego. Fue un efecto dominó que parecía haber sido ideado por el diablo en persona, y las cosas empeoraron progresivamente hasta que, con todo el mundo atrapado en estas arenas movedizas, desencadenó una guerra civil que no lleva a ninguna parte. Hay tantas fuerzas en juego aquí que cuesta diferenciar amigo de enemigo. Nadie sabe por dónde va a venir la siguiente bala.

De esta clase de campo de batalla estoy informando ahora. Y elegí venir aquí por voluntad propia.

Estoy mirando fija y directamente al rostro de la realidad, de la verdad tras este mundo.

Ha pasado medio año desde el fin de mi viaje.

No pude encontrarme con Lightning al final, pero descubrí toda la historia sobre el otro mundo gracias a Hope Estheim; él me contó todo en su segunda entrevista.

La historia del retorno de Lightning, sus trece días antes del fin del mundo, la liberación de las almas, la batalla contra el Altísimo y nuestro renacer en un nuevo mundo. Lightning y sus amigos lucharon por nosotros cuando ese otro mundo acabó, y gracias a ellos renacimos en éste.

Éste debería haber sido un nuevo mundo lleno de esperanza.

¿Pero qué es lo que realmente está pasando en este mundo?

Yo ya no lo sé. He visto demasiadas cosas terribles en los campos de batalla.

Lightning y sus amigos derrotaron a Bhunivelze, el Dios de la Luz. Acabaron con la era del reinado del Altísimo sobre la humanidad y nos regalaron un nuevo mundo donde podemos ser libres. Hicieron todo eso por nosotros, pero miradnos ahora. En un mundo sin el Altísimo, los humanos han terminado por matarse unos a otros. ¿Por qué luchan? ¿Qué consiguen con eso? ¿O es este deprimente mundo lo que realmente merecemos? Los humanos son estúpidos y se guían por la avaricia, y este mundo, este lío de odio y guerra… ¿es éste el mundo hecho a medida para la humanidad?

Oigo apresurados, entrecortados pasos que vienen hacia mí. El lastimero sonido de zapatos grandes es inevitable: las botas militares no son muy recomendables para quienes las lleve. Lo oigo quejarse entre dientes, de vez en cuando, sobre lo escasos que son los suministros, de lo casi imposible que es conseguir zapatos que vengan bien.

El joven que viene corriendo hacia mí con un rifle al hombro es miembro de la milicia, y está aquí para asegurar mi seguridad mientras hago mi trabajo como reportera. Me dijo que no ha recibido entrenamiento militar, que hasta hace poco sólo era un estudiante. Ni siquiera los estudiantes se libran, tienen que tomar las armas y luchar. Ésta es la realidad de la guerra civil.

-¡Mal asunto! ¡Aquí corremos peligro!

Los rasgos del joven se contorsionan por la ansiedad. Entiendo lo que quiere decir apenas un instante después. Un misil impacta en el edificio justo a nuestro lado.

El ensordecedor estruendo es seguido por una violenta erupción de humo, y pequeños escombros llueven sobre nosotros. El joven está acostumbrado, y corre ágilmente a refugiarse, pero todo lo que yo puedo hacer es quedarme quieta estúpidamente. Hemos tenido suerte. Si el misil hubiera caído un poco más cerca nos habría reventado la onda expansiva, o quizá nos hubieran aplastado escombros mucho más grandes.

Mi suerte se agota al momento siguiente.

El impacto de la explosión me golpea por todas partes. El segundo misil explota cerca, y mi consciencia se esfuma.

. . .

Vuelvo en mí, y me detengo.

No sé cómo, pero he estado de pie, caminando. Y no estoy sola. Soy parte de un grupo de unas docenas de persona, todos avanzando penosamente en la misma dirección, hacia algún lugar.

Sé que me golpeó un misil y que me desvanecí después de eso, pero no puedo recordar por qué estoy caminando con estas personas. ¿Acaso desperté y salí huyendo en medio del delirio y de alguna forma me uní a esta procesión? Quizá, en mi desesperación, perdí la memoria, no lo sé. Debe de ser el shock por el impacto, pero me siento ligera y mareada. El zumbido en mis oídos es tan fuerte que tendré suerte si es que escucho algo.

Me quedo quieta, y el grupo sigue adelante, dejándome atrás. Algunos parecen soldados, pero la mayoría son civiles. Deben de ser una banda de refugiados. Trato de buscar al joven que me guiaba, pero no lo veo.

Todos parecen exhaustos. Caminan inestables, con los hombros hundidos.

-¿Estáis bien? ¿Adónde vais?

Intento hablar con ellos, pero nadie responde. Ninguno reacciona, ni siquiera suspiran. O quizá alguien ha dicho algo, sólo que no puedo oírles con el zumbido de mis oídos.

Me rindo y decido seguirles. Estamos rodeados por una pálida oscuridad, y parece como si la noche se cerniera sobre nosotros. Sé que perdí el conocimiento poco después del mediodía, así que he debido de pasar horas inconsciente. Y no es solamente el paso del tiempo lo que se me ha escapado; de alguna forma u otra, he cubierto alguna distancia. Había estado en el pueblo en medio de mi investigación reportera, pero aquí no hay un solo edificio a la vista, no aquí en medio de la llanura desolada. Miro arriba y sólo veo un cielo oscuro y nuboso. No creo que el sol se haya puesto, no todavía, pero no lo veo por ninguna parte. Profundas y oscuras sombras se arremolinan en el suelo, y no veo por qué.

Algo extraño pasa aquí.

Eventualmente el camino se convierte en una larga y ardua cuesta arriba. A mí me deja agotada, pero nadie más se detiene para recuperar el aliento. El sonido de mi entrecortada respiración se mezcla con los pasos de estos silenciosos caminantes.

Llego a lo alto de la cuesta y me hallo en la cima de una pequeña colina.

Se me escapa un grito ahogado.

Un oscuro océano se encuentra frente a mí. O quizá sea un lago, o un río gigantesco. Más allá de las sombrías aguas que fluyen como la misma oscuridad, las sombras penden cual velo, y no puedo ver ningún horizonte ni la orilla opuesta. Pero una cosa es segura. Lago o río, no debería estar aquí. Mi trabajo como reportera me ha traído a una región interior. No hay grandes lagos, ni ríos, ni nada.

¿Qué océano es éste?

Estoy completamente perdida, pero nadie me presta atención: la procesión me adelanta y sigue colina abajo hacia la orilla. Los que guían el paso ya han alcanzado el borde, y se adentran en las oscuras aguas. ¿Qué intentan hacer?

Entonces es cuando vislumbro un hombre en particular, de pie en la orilla, observando nuestro avance. Es musculoso y parece una fortaleza en sí, y exuda un aura de severidad. Su cabello violeta se mece suavemente en el aire, un viento que carece del aroma salado del mar.

Me quedo quieta, paralizada en el sitio, y lo miro fijamente. Mi presencia no le pasa desapercibida a él tampoco, y nuestros ojos se encuentran. Nunca creí que algún día lo conocería, pero…

-Ya deberías saber quién soy.

Su voz me llega como si fuera el retumbar de la tierra bajo mis pies, de algún lugar muy profundo.

-Los conociste y descubriste la verdad sobre el otro mundo.

Sus palabras activan mi memoria, y creo que sé de lo que habla. Debe de referirse a Hope Estheim y sus amigos.

-¿Cómo sabes que los conocí…?

-Tu corazón es demasiado transparente para mí. Deben de habértelo contado. Soy ese despreciable enemigo que manipuló el Caos e invocó la destrucción. Mi nombre ya está grabado a fuego en tu memoria.

Se gira hacia mí, su mano derecha extendida, y aferra el aire en un puño. Debe de ser alguna clase de hechicería: siento tensión en mi pecho, como si mi corazón estuviera atrapado en una mano invisible. Mi corazón comienza a latir desesperado y tengo que hacer esfuerzos para respirar. Y un único nombre se abre paso en mi consciencia, involuntariamente arrastrado desde las profundidades de mi mente.

-¡Caius Ballad! …

El hombre que deseó el fin del mundo, el hombre que causó la distorsión de la diacronía, el hombre que desató la destructiva fuerza conocida como el Caos. Al final de la lucha que duró 13 días, ese otro mundo fue destruido, y las almas de la humanidad renacieron en este mundo, con Lightning y los demás mostrándoles el camino.

Pero Caius rechazó el renacer. Permaneció en el plano entre la vida y la muerte, y se convirtió en el guía de las almas de los difuntos.

… Las almas de los difuntos.

Comprendo lo que pasa y me golpea como si me cayera encima una pared de ladrillos, y me giro hacia la procesión de gente de la que había formado parte. Se dirigen al mar, y no muestran signo de detenerse aunque el agua les llegue a los tobillos, donde las olas rompen una y otra vez en la orilla. Marchan sin parar a las profundidades, sin dudar, y uno a uno desaparecen bajo las olas, hundiéndose en el oscuro más allá. Una ágil y silenciosa procesión. Sin pronunciar palabra, son tragados por las aguas sin dejar rastro, ni una sola burbuja. ¿Cómo no me he dado cuenta? Ni uno de ellos tuvo que recobrar el aliento, ni uno suspiró una vez, en el largo camino hasta aquí.

Esta gente ya ha exhalado su último aliento, así que ¿qué pinto yo aquí? ¿No soy acaso parte también de la procesión?

No quiero admitirlo, pero me doy cuenta igualmente. La impresión es demasiado fuerte para soportarla, y me tiemblan las rodillas. Incapaz de mantenerme de pie, caigo de bruces.

Estoy muerta. El misil me dio.

La incertidumbre y la confusión se abren paso en la superficie de mi mente como olas, dejándola en absoluto blanco. Estoy muerta, estoy muerta, estoy muerta…

Antes de que me dé cuenta, todos se han ido. Los difuntos han sido engullidos todos por el mar de oscuridad, y soy la única que queda, de rodillas frente al Dios de la Muerte.

-Los muertos ya han desaparecido en la oscuridad. Casi ha llegado la hora de que te vayas.

Me siento aplastada por el peso de las solemnes palabras de Caius. Ve y húndete en el mar negro, ¿es lo que me está diciendo? ¿Qué será de mí después de eso? ¿Vagaré las profundidades de las sombrías aguas, como una de los difuntos? ¿Será mi fin?

Odio esto. Yo no quería que mi vida acabase así.

-… Espera.

No me queda nada salvo la muerte. Si esto significa punto y final, hay cosas que quiero saber antes de que mi vida se desvanezca.

-¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué renací en este mundo? ¿Cuál era el propósito?

Caius no responde; de hecho, ni siquiera reacciona. Vale, pues no me importa. Sigo desahogándome.

-El Redentor derrotó al Altísimo en los últimos trece días, y conseguimos un nuevo mundo. Todos los que vivíamos en ese otro mundo, nuestras almas fueron guiadas a éste. Debería haber sido un nuevo mundo lleno de esperanza.

-¿Estás diciendo que no lo es?

-He visto el verdadero rostro de este mundo en los campos de batalla. Nos odiamos los unos a los otros, nos matamos los unos a los otros.

-Tan sólo has descrito a un ser humano. El conflicto se halla en el mismo núcleo de la humanidad. Una vez los dioses que llevaban las riendas de los humanos desaparecieron, era natural que éstos lucharan entre ellos por el control.

-Si lo que dices es cierto, un mundo bajo el control del Altísimo sería más pacífico. ¿Acaso fue un error, derrotarle?

No. No, no. ¿Qué estoy diciendo? He conocido a Hope y a los demás, sé que ellos salvaron a la humanidad, eso lo sé. Debería estarles agradecida, por traer nuestras almas a este mundo. Entonces, ¿por qué…?

-¿Dices que renuncias a todo lo que han hecho? ¿Que no deberían haber acabado con Bhunivelze, el Dios de la Luz?

-No, no me refería a eso. Es sólo que… es sólo que no lo entiendo. Sus intenciones eran nobles y buenas. Pero este mundo es feo y triste. No puedo comprenderlo.

-Eres tan humana como lo son ellos.

Hay un matiz de desdén en su voz, una nota de burla.

-Así que no te gusta el mundo que te dieron, y le diste la espalda. Si tanto te ofende vivir en este mundo, te sugiero arrojarte al mar de la muerte.

Me siento en el suelo, quieta, mientras él señala el mar negro, donde los difuntos son engullidos por completo.

-Las almas de los humanos que se disuelven en el Caos algún día renacerán, y se les concederá una nueva oportunidad en vida. Si lo deseas, no obstante, también se te permite el descanso eterno. ¿Eliges dormir en el vientre de la oscuridad para nunca despertar? Tus ojos, cerrados por siempre, no habrán de contemplar este deleznable mundo nunca más.

-¿Me estás diciendo que si elijo dormir, tú, el Dios de la Muerte, me concederás el deseo…?

-No, tú concedes tus propios deseos. Si es el sueño lo que deseas, dormirás hasta el fin de los tiempos, eso es todo. Sabes la verdad, pero no ves la verdadera esencia de las cosas. El Altísimo no existe en este mundo. Éste no es un mundo en el que los humanos son marionetas manipuladas por él. Los humanos, y sólo ellos, eligen la condición de su mundo. El mundo se construye únicamente en base a la voluntad de la humanidad.

-La voluntad de la humanidad…

-Sí. El mundo que has rechazado no es en absoluto el resultado de los planes de un dios retorcido, sino de la voluntad humana. Y tú misma eres una de esos humanos que crearon este mundo.

Las palabras del Dios de la Muerte resuenan en mis oídos como un trueno, y me siento como si me hubieran pegado un puñetazo en la boca del estómago. Los recuerdos surgen de las cenizas en mi mente, recuerdos de las sonrisas de quienes lucharon en ese otro mundo hasta el final.

¿Por qué lo olvidé? ¿Cómo no me di cuenta? Los he conocido. Debería haberlo entendido.

He tomado la decisión.

Me levanto y doy un paso adelante.

Allá voy. Hora de internarme en el mar oscuro.

-Veo que has decidido abandonar este feo mundo para siempre.

-Te equivocas.

Miro al mar durante un largo momento.

-Voy a entrar ahí para poder regresar. Puedo decidir adónde voy, es lo que has dicho. Puede que esté muerta ahora, pero si decido vivir otra vez, puedo renacer como una persona diferente.

-Y una vez más, el estado del mundo te hará caer en la desesperación.

-Si el mundo es feo, yo lo cambiaré.

Eso es lo que ellos me enseñaron.

Individualmente, quizá seamos insignificantes, pero juntos tenemos el poder de cambiar el mundo.

Lo que yo tenga puede que sea pequeño y frágil, pero estoy lejos de estar desvalida. Puedo cambiar el mundo, poco a poco, a mi manera. Creía en ello, y por eso me fui a los campos de batalla. Quería enseñarle al mundo entero la verdad, atraer la atención sobre la despiadada realidad en la que vivimos. Quería hacer crecer la cantidad de voces que clamaran por el fin de la guerra. Quería ayudar a guiar el mundo a un futuro mejor.

Pero fui derrotada por las cosas crueles y terribles que vi, aplastada bajo el peso de la realidad y traída de rodillas, y di por perdido el futuro, perdí la fe en el mundo.

-Gracias. Me alegro de haber podido hablar contigo al final. Gracias a ti, veo dónde me equivoqué.

Recobro la compostura.

Ya no tengo nada que temer. No tengo dudas tampoco. Cuando vuelva a nacer, no perderé la fe. Mantendré la vista en el futuro, avanzaré hacia él paso a paso, sin abandonar la esperanza de cambiar el mundo. Me prometo a mí misma esto mientras alcanzo la orilla y comienzo a adentrarme en las oscuras aguas.

-¿Realmente deseas la muerte?

Un débil susurro murmura en mi oído. No una sola voz, sino muchas.

-Tu vida aún no se ha apagado.

Es la fantasmal voz de una chica joven. Estoy rodeada por capas y capas de esta voz, flotando hacia mí tanto cerca como lejos.

-Puedes ir allá donde quieras.

-Es tu voluntad lo que te muestra el camino.

Conozco estas voces, a estas jóvenes.

Y esto es lo que Caius Ballad, Valedor de estas jóvenes, me dijo:

-Vive o muere. Es tu decisión.

-Espera, yo ya estoy muerta, ¿no? …

-Los muertos desaparecen en silencio. No hay difunto tan charlatán como tú.

-En tal caso, aún estoy…

-¿Qué camino elegirás? La decisión es tuya.

Deseé vivir.

El Dios de la Muerte sonrió, y era una amable sonrisa.

Las voces de las muchas Yuuls susurraron en mi oído:

-Dime a mí misma… que sea feliz junto a Noel.

Siento mi corazón latir de nuevo. Mi cuerpo es ligero, y el suelo se aleja de mis pies. El cielo oscuro me absorbe, y me siento a mí misma ascendiendo en la oscuridad.

Alguien me guía. No veo quién es, pero siento la presencia de una blancura suave y peludita. Lo que quiera que sea, lleva una luz de color rosado, como una linterna que me muestra el camino, una luz de neón en la oscuridad.

Vuelo, y es como si estuviera siendo guiada por la mano de esta cálida presencia. Eventualmente, una pequeña mota de luz aparece frente a mí. Como el amanecer del verano, la luz y el calor comienzan a crecer y a intensificarse, incluso mientras lo contemplo… Oh. Ha de ser la luz del día.

Hay tanta luz que no puedo mantener los ojos abiertos. Esta presencia blanca que me ha traído empieza a alejarse. Estoy asustada y me siento sola, pero una voz infantil me habla tranquilizadora:

-No pasa nada. Ya puedes irte a casa, kupó.



Abro los ojos.